A diario en el Centro de Atención Permanente CAP de Xela, un promedio de 80 y 90 personas acuden a practicarse la prueba de covid-19, de estas en las últimas semanas se ha encontrado un 20 por ciento de positividad.
Mirna Alvarado/LaPrensadeOccidente
De acuerdo con Salvador Soto director del CAP, en las últimas semanas se ha notado una disminución en el índice de positividad, es decir de personas que se confirman como portadoras de covid-19.
“Aunque la cifra de solicitantes de la prueba se mantiene, vemos positividad de 20 a 15 por ciento, es una estadística mínima comparada con los primeros días del mes cuando se detectaba un 50 por ciento de personas positivas”, aseguró el galeno.
Aunque la incidencia de casos positivos haya tenido una baja, Soto pide a la población no dejar de lado las medidas de protección personal, debido a que todos los días se corre el riesgo de un contagio.
En lo que va de la pandemia, se han detectado 8 mil 962 casos positivos en el municipio de Quetzaltenango, de los cuales 1 mil 950 continúan activos y 268 personas han fallecido.
La mayoría de pacientes positivos son de las zonas 1, 3, 5 y 7, además un porcentaje proviene del área rural específicamente de San José Chiquilajá y de Llano del Pinal, hasta ahora las autoridades de salud no han profundizado en las causas de positividad en estas comunidades.
Aumenta positividad en personas productivas
El director del Centro de Atención Permanente, añadió que en los últimos meses el comportamiento se muestra impredecible, pues ahora además de atacar grupos vulnerables también está causando mortalidad en personas de edad media productiva.
“Son personas jóvenes de entre 20 a 45 años, les llamamos productivas porque por lo general son quienes trabajan, lo que nos preocupa no es el contagio como tal, sino que la mayoría está falleciendo, entonces se deben proteger más”, enfatizó.
Intentaron vacunarse
De acuerdo con el doctor Salvador Soto, durante la jornada de vacunación se inmunizaron a alrededor de 7 mil personas la mayoría personal de salud y durante el proceso se detecto que un 10 por ciento no pudieron demostrar que pertenecían a una entidad de salud ya sea pública o privada.
“Revisamos la base de datos y se cotejaron los documentos que teníamos, cuando se encontraron discrepancias pedimos que demostraran que efectivamente eran parte del personal de primera línea, pero ninguno lo pudo demostrar, entonces no se vacunaron”, mencionó.