Recientemente bajo la supervisión de Juan Carlos Díaz, de la Dirección Municipal de Servicios Ambientales, taló los árboles del parque a Benito Juárez, en seguimiento al tema, esto dice un urbanista y el Inab.
José Cancinos/laprensadeoccidente.com.gt
Imposible recuperarse
Marco Chávez, arquitecto y urbanista, concejal electo de la municipalidad de Xela, manifestó su opinión en cuanto a la tala y que el Inab dijo que los árboles del Benito Juárez estaban maduros y sobremaduros. “Desde mi perspectiva como arquitecto especialista en temas urbanos, sí creo que se debe hacer un estudio previo a la intervención de cualquier área especialmente verde, pues los árboles nos garantizan la regulación de la temperatura, gestionan el agua de lluvia para que minimizar el tema de las inundaciones”, señaló.
Añadió que cuando se ve una cobertura amplia de árboles urbana en la ciudad es como una especie de esponja que absorbe y la filtra lenta y periódica al manto fríatico que garantiza que las inundaciones van a hacer menores.
“No es nada más de decir vamos a cortar esos árboles y plantar unos ornamentales que no presentan servicios ecosistémicos como son los microclimas que son necesarios en un entorno urbano”, alertó.
Sentenció que se dañó el patrimonio ambiental y para recuperarlo es imposible, por eso muchos criterios parten de la conservación, porque recuperar áreas exterminadas no se puede.
“El criterio último en cuanto a los árboles es la tala, porque manifiestan una riqueza y un patrimonio natural para todos los vecinos”, recomendó.
Son prioridad en otros países
En otros países a raíz del cambio climático, muchas ciudades están priorizando el tema de las áreas verdes y generando una legislación y políticas públicas que vayan a garantizar su crecimiento.
Cuando se habla de área verde se refiere al arbolamiento urbano, jardines, áreas permeables que son todas las que pueden absorber y filtrar el agua de lluvia y generar el ciclo de agua.
“El tema de garantizar esta conservación es claramente con el mantenimiento constante que se desarrolla con el arbolamiento y poda para generar el inventario de los árboles urbanos y un diagnóstico sobre la situación de cada uno de ellos para garantizar que sean conservados mayormente en las áreas urbanas, porque es donde hay mayor déficit de áreas verdes”, Dijo Chávez.
Esa es la gran razón que en otros países se conservan y protegen, porque se sabe que garantizan una mayor calidad de vida y por ejemplo, también garantizar que la población en un futuro no presente enfermedades respiratorias a causa de la ausencia de áreas verdes y la polución o contaminación del CO2 generado por vehículos.
“Es por eso que en otros lugares los árboles se cuidan, protegen, y no se tala de manera indiscriminada”, repudió.
Todas las acciones emprendidas en ese sentido deben de partir de planes estratégicos que detonen en proyectos y planes específicos. Lamentó que no se cuenta con esos estudios en materia de paisajismo y de áreas verdes en el municipio. Estimó que lo primero con que se debería contar es con un plan en cuanto a las áreas verdes. Ya sea un plan maestro que pueda detonar en una política pública municipal: cómo accionar, qué criterios tomar en cuanto a los parques, calles, áreas donde exista cierta cobertura verde, que es lo que no tiene ahorita.
Existe el POT, pero acota en cierta medida y parámetros en cuanto a las áreas verdes, pero se necesita una política y plan estratégico para emprender estas acciones. Sin esto lo que se logra son proyectos aislados, sin contexto, sin estudio y desconectados de una planificación estratégica. “Ese es el peligro principal”, alertó.
Para Chávez tema importante es que sí se pudo haber hecho una poda en el Benito Juárez y se pudo contar con especialistas de la academia y profesionales en la materia que no son solo agrónomos, también paisajistas y urbanistas. “No vemos este tipo de profesiones en el aparato municipal, que son necesarios para dar una solución certera y la intervención del espacio público de manera certera”, lamentó. Recordó que el parque Benito Juárez está protegido como un bien patrimonial aislado, lo que implica aplicar especialistas patrimonial que no solo se refiere a la arquitectura, al monumento, sino que es el entorno y contexto.
Todos esos temas se deben de tocar previo a la intervención de cualquier proyecto y no solo que sean ocurrencias de alguna persona que pensó que sería una buena idea de talar todos los árboles.
“El mantenimiento era lo primordial y de ahí un tema de intervención integral”, afirmó.
No da la cara
La Dirección Municipal de Servicios Ambientales es la rectora del medio ambiente en la ciudad, por lo que se ha buscado a su director Juan Carlos Díaz, para que dé a conocer qué proyecto implementará la comuna tras el “ecocidio” que cometió, como lo han señalado grupo de vecinos, pero los intentos han sido infructuosos. Esta semana se le ha buscado en dos ocasiones en su oficina y no se le ha encontrado, además que se le ha llamado en tres ocasiones.
Encargado de Inab
Guillermo Monterrosa, director del Inab, señaló que en este caso fue una obra y decisión eminentemente municipal basado en la Ley Forestal que indica que las municipalidades pueden emitir sus licencias de tala de árboles en perímetros urbanos.
Además, dijo que los árboles del parque no eran parte de un bosque natural, más bien estaban calificadas de plantaciones realizadas para el ornato, los que llegan a su tiempo de madurar y sobremadura y el era el caso de varios de los árboles que se encontaban en dicho lugar.
Refirió que un árbol se puede ver vigoroso en su parte exterior, pero por dentro puede irse deteriorando hasta llegar al extremo de desplomarse por debilitamiento. “Nosotros como Inab que somos observantes de la ley, no tenemos más que fomentar a la Municipalidad que vuelvan a plantar nuevas especies para el ornato y salud de los ciudadanos”, finalizó.
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