Los restos de Hemán Noé Reyes Rivas, de 59 años, superintendente y pastor general de la Misión del Espíritu Santo Santuarios Monte Sinaí de Quetzaltenango, fueron depositados en un cementerio privado de la zona 1, al mediodía de este domingo 15 de septiembre.
José Cancinos/laprensadeoccidente.com.gt
El sepelio se realizó luego de cinco días de velación en el templo central ubicado en la cima del cerro Paseo La Pedrera, de esa misma zona, luego de que el martes 10 trascendiera que había fallecido consecuencia de un infarto al corazón.
La decisión de la familia y el comité ejecutivo de la misión de velar cinco días al “doctor Hemán”, como lo llamaba su congregación, fue para darle la oportunidad a las diferentes delegaciones de sus filiales dentro y fuera de las fronteras patrias para que llegaran a darle el último adiós.
El sepelio de tres horas
El féretro salió a las 10 horas del templo, pero antes de partir de su misión, dieron un recorrido al férretro por los principales ambientes, luego fue ingresado su casa de habitación, que se ubica el mismo complejo religioso.
Minutos más tarde el entierro emprendió su camino con el acompañamiento de seguidores hacia el camposanto, recorrió las calles de la zona central, pasó frente al Palacio Municipal, por la amistad que tenía con el alcalde Juan López, que de hecho, fue Reyes quien oró por él antes de iniciar su primera administración hace cuatro años.
En el camposanto se realizó un breve acto protocolario funerario que dio paso a trasladar el féretro a la bóveda donde fueron depositados sus restos.
Quedó una bóveda arriba donde están depositados también los restos de su papá Noé Reyes, fundador de la misión.
El cargo de superintendente fue entregado a Alma de Reyes, esposa del ahora extinto pastor general, que ahora estará al frente de toda la misión.
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