Aunque en los últimos cinco meses del año se espera que la economía se vaya recuperando, las metas establecidas a inicios de año no se alcanzarán. Las mayores expectativas para el repunte económico están puestos en 2021.
Por José Racancoj
En marzo, con el reporte del primer caso de coronavirus y las medidas establecidas por el Gobierno, la economía sufrió un duro golpe, muchas empresas cerraron y miles de empleos se perdieron.
De hecho, según estimaciones de la Cámara de Comercio de Guatemala, filial Quetzaltenango, el ciclo económico se rompió en un 85 por ciento, lo cual trajo consecuencia sociales y económicas muy críticas.
Ahora, con la flexibilización de las restricciones por parte del Gobierno, se espera que la economía empiece a recuperarse durante los cinco meses que restan del año.
“Creo que la mayoría de empresario estamos motivados, con mucho entusiasmo. Se están poniendo en práctica nuevos procesos y protocolos porque el momento lo demanda. Sabemos que no es fácil, pero le estamos poniendo amor y las ganas necesarias”, refirió Jorge García, presidente de la Cámara de Comercio filial Quetzaltenango.
García reconoció que aunque estos meses serán de recuperación, las verdaderas expectativas están puestas en el 2021, donde se espera que el “rebote” de la ruptura del ciclo económico sea muy positivo. “En 2021 esperamos alcanzar un crecimiento del PIB (Producto Interno Bruto) del 4.6 por ciento”, refirió. Estas cifras son totalmente opuestas a lo que se espera este año, donde se calcula un decrecimiento de hasta el 5 por ciento
Reapertura, más no reactivación
Otto Vargas, del Grupo Gestor, explicó que actualmente la economía se encuentra en una fase de reapertura, pero no de reactivación.
“Una parte de las empresas ya está operando, pero otras aún se preparan, como el sector hotelero, debido a protocolos que deben cumplir”, refirió el experto.
Vargas explicó que para lo que resta del año se iniciará con una recuperación, pero no se alcanzarán las metas propuestas a inicios de año. “El país en general ha perdido productividad, es decir que no llegaremos a metas económicas como el 3.5 por ciento del PIB. Se espera que el PIB no crezca, que sea negativo”, explicó Vargas.
Regresar a como estaba la economía, previo a la pandemia, podría tomar todo el 2021 y posiblemente 2022, refirió. “El turismo sigue varado y al no recuperarse tenemos problemas”, apuntó.
Vargas expresó que se requiere un mayor control en el comercio informal, donde se observan aglomeraciones, y también se necesita que el gobierno local tenga un papel eficiente, para que sectores puedan generar empleos. “Un ejemplo es el sector inmobiliario, pues hay permisos que no se han logrado y esto detienen la inversión y el empleo”, puntualizó.