Caso Gabriela Barrios: el exfutbolista y exjugador del Xelajú MC, Emerson Jorge Marroquín Alfonso, es hallado culpable de los delitos de femicidio y femicidio en grado de tentativa.

José Racancoj/La Prensa de Occidente
Más de cinco años después de que sucedieran los hechos, el Tribunal de Femicidio de Xela ha emitido sentencia condenatoria por el crimen de la poetisa quetzalteca Vilma Gabriela Barrios López, quien en 2017 fue hallada sin vida, con múltiples puñaladas, en el río Samalá.
Los jueces encontraron culpable al ex futbolista y exintegrante del Xelajú MC, Emerson Jorge Marroquín Alfonso, a quien le impusieron una condena de 66 años y 8 meses de prisión.
De acuerdo con el Tribunal, Marroquín cometió el delito de femicidio en contra de Gaby, por lo que le impusieron la pena de 50 años, mientras que por femicidio en grado de tentativa, el cual cometió en contra de la mamá de Gaby, Lili López, se le castigó con 16 años y 8 meses.
En días anteriores, la Fiscalía y la Fundación Sobrevivientes habían solicitado una condena de 96 años para Marroquín.

Previo a que los jueces emitieran la sentencia, Erick Lancerio, quien fue pareja de Gaby, pidió justicia y relató que hizo una promesa sobre su tumba, de que su caso no quedaría impune como ha sucedido en otros.
Tras conocer la condena, Lancerio se mostró agradecido con Dios y dijo que solicitará que Marroquín cumpla su condena en un centro carcelario fuera de Quetzaltenango.
Nery Barrios, hermano de Gaby, también se mostró agradecido con Dios y dijo que ella estaría contenta por la sentencia. «Han sido cinco años difíciles para la familia. Estoy seguro que mi madre está tranquila y agradecida con Dios».
Por su parte Marroquín, antes de la sentencia, había solicitado que se respetaran sus derechos y aseguró que la prueba científica lo dejaba absuelto.
«Las manos las tengo limpias, soy un hombre trabajador, honrado, nunca he cometido ningún delito», dijo Marroquín, quien aseguró que fue futbolista durante 18 años.

El caso
El 4 de febrero de 2017, Gabriela y su mamá viajaron de Xela a Cantel con el objetivo de conocer una vivienda que pretendían alquilar y que era ofrecida en arrendamiento por el ahora condenado.
Pero estando en el lugar fueron atacadas con arma blanca por Marroquín. En horas de la noche, la mamá fue hallada con vida, mientras que al día siguiente Gabriela fue encontrada muerta en el río Samalá.
Durante la lectura de la sentencia, se detalló que la víctima fue apuñalada 15 veces en el abdomen, mientras que su mamá, Lili López, tenía 35 heridas en el tórax posterior.
El Tribunal consideró como clave el testimonio de Lili López, quien detalló cómo se dieron los hechos, los cuales estaban sustentados con diferentes pruebas.