Este año Michelle María Walter Palmieri aspira a ser reconocida como Guatemalteca Ilustre, un galardón al que también fue nominado su papá en dos ocasiones anteriores.

José Racancoj/La Prensa de Occidente
Algo casi excepcional en el evento Guatemaltecos Ilustres, que se ha desarrollado por 15 años, es que tanto padre como hija hayan sido nominados en algún momento a este reconocimiento.
Y es justo lo que sucede con Michelle María y su papá, el quetzalteco Reynold O. Walter, quienes comparten la experiencia de ser parte de este evento en el que participan personas de reconocida trayectoria.
Michelle, quien es cantautora y educadora musical, compite este año en la categoría artística, mientras que su papá fue nominado durante dos años, en 2018 y 2019, en la categoría social, pues es director ejecutivo de una organización que apoya a micro, pequeñas y medianas empresas con microcréditos, especialmente dirigidos a mujeres del área rural.
Reynold Walter, nacido en la ciudad altense pero residente en día en la capital, dijo sentirse orgulloso de la nominación de su hija, quien actualmente vive en Estados Unidos. “Solo el hecho de participar es motivo de mucha honra. En mi caso, como quetzalteco, me he sentido muy contento, tuve el privilegio de ser nominado el año pasado y el anterior”, dijo.
Con el corazón en la música
Este año Michelle María, quien descubrió desde muy pequeña que la música es su pasión, podría ser una de las finalistas de este galardón en la categoría artística.
Para ella, más allá de ser un medio indispensable para el desarrollo humano, la música también es un instrumento para crear un mundo mejor, con el que quiere redireccionar a temas profundos de conciencia colectiva.
La cantautora guatemalteca nació en la ciudad capital en 1986. A los tres años se inició en el ballet clásico y es así como descubrió su amor por el arte.
Durante su niñez pasaba sus tardes en clases de ballet, baile moderno, canto, música y actuación. Esto la ayudó a crear disciplina, respeto y amor hacia el arte.
A sus 15 años decidió dejar de bailar para dedicarse por completo a estudiar música y canto. Es allí cuando audicionó y fue seleccionada como solista de la banda “Smooth Jazz Band”.
El compartir escenario con músicos guatemaltecos de alto nivel, fue un momento crucial en su vida, para darse cuenta que se podía vivir de ser músico profesional.
Tiempo después, y con el apoyo de su familia, se fue a estudiar a la Academia de Música Fermatta, en la ciudad de México (escuela afiliada a Berklee College of Music). Durante sus estudios en Fermatta, trabajó en la Universidad para cubrir su colegiatura. Se destacó con los mejores promedios y fue premiada por su excelencia académica. Obtuvo dos becas para concluir sus estudios en Berklee College of Music, en Boston, Estados Unidos.
Al terminar su licenciatura, y tras convertirse en la primera mujer guatemalteca graduada de Berklee College of Music, con honores Summa Cum Laude, se mudó a la ciudad de Nueva York donde vive actualmente. Desde entonces, Michelle ha compartido su música en escenarios alrededor del mundo en países como Rusia, Turquía, Colombia, México, Italia, Guatemala, entre otros.
En Nueva York, descubrió su vocación por la educación musical para la primera infancia y logró llegar a ser directora de los Programas de Música Bilingüe para la Primera Infancia en las escuelas TLB Music y las escuelas afiliadas a la Universidad de Columbia, Greenhouse y Family Annex.
A principios de este año, el proyecto de Michelle “Canciones para un nuevo mundo” ganó dentro de 90 participantes, la beca que otorga la Organización Queens Council on the Arts, de la ciudad de Nueva York. Este proyecto es un ciclo de canciones bilingües para niños que incluye una carta de amor a Guatemala titulada “Mis raíces”. Un proyecto que refleja a plenitud la filosofía artística de Michelle, utilizar la música como un medio para crear una conciencia social más profunda y empática de un mundo mejor.
Para apoyar a Michelle puedes ingresar al link guatemaltecosilustres.com/index.php/2020/08/21/michelle-maria-walter-palmieri/ y votar por ella. Las votaciones finalizan el próximo 15 de septiembre.
Con la música en la sangre
Este amor que Michelle le tiene a la música también lo ha experimentado su papá, quien además de ser ingeniero civil, catedrático en la Universidad San Carlos de Guatemala, emprendedor y llegar a dirigir la Fundación de Asesoría Financiera a Instituciones de Desarrollo y Servicio Social (FAFIDESS), fue cantante y compositor de canciones de protesta.

Reynold Walter, se trasladó a la capital a los 18 años para iniciar sus estudios universitarios, obteniendo una beca auspiciada por la UNESCO, la Universidad de San Carlos de Guatemala y el Ministerio de Educación, para realizar estudios de Profesor en Ciencias, con Especialidad en Matemática. Luego se graduó de Ingeniero Civil con estudios de Maestría en Educación Superior en la USAC.
Durante su época de estudiante universitario desarrolló la pasión por la música de conciencia social, conocida como trova, participando en festivales universitarios en Centroamérica. Como cantautor compuso letra y música para más de 50 canciones de diversos géneros, algunas de estas fueron grabadas por artistas guatemaltecos y por disqueras nacionales, entre ellos Electronicos La Fuente.
Por más de 25 años se desempeñó como profesor universitario en las facultades de Ingeniería, Medicina, Psicología, Agronomía y Profesorado de Segunda Enseñanza en la Universidad de San Carlos de Guatemala.
Luego se integraría como director ejecutivo a la Fundación de Asesoría Financiera a Instituciones de Desarrollo y Servicio Social, FAFIDESS, desde donde ha contribuido al mejoramiento de las condiciones de vida de las personas que conforman la base de la pirámide de la sociedad guatemalteca, a través de productos y servicios financieros y de desarrollo empresarial, orientando sus esfuerzos al sector de la micro y pequeña empresa, microfinanzas e inclusión financiera.