En una reunión celebrada en el Congreso de la República, el alcalde de Quetzaltenango, Juan López, expresó su inconformidad con la tarifa que el Instituto Nacional de Electrificación (INDE) cobra actualmente a la Empresa Eléctrica Municipal de Quetzaltenango (EEMQ), calificando como «exagerada» y «un castigo para el pueblo de Xela».
Redacción/laprensadeoccidente.com.gt
La reunión tuvo lugar en las oficinas de la bancada de la Unión Nacional de la Esperanza (UNE), partido al que se ha aliado el jefe edil. Acompañado por autoridades del INDE, y el ministro de Energía y Minas, Víctor Ventura; López advirtió que no está dispuesto a asumir los costos políticos ni económicos de una situación que considera injusta.
“Nosotros no podemos, por capricho, por no haber voluntad política de poderlo solucionar, que usted lo puede solucionar, [permitir] que se quiebre una empresa», expresó el alcalde durante su intervención. También añadió que, de no haber una solución, están considerando declarar lesivo el convenio actual con el INDE y optar por contratar a una empresa privada que les provea la energía necesaria.
Según López, ya cuentan con propuestas de empresas interesadas en suministrar los 40 a 45 megavatios que actualmente consume Quetzaltenango. “Y si van a joder todo, van a perder todo”, sentenció, haciendo referencia a la posibilidad de romper relaciones con el INDE.
Juan López puso de ejemplo a la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), organización a la que ya no pertenece la Municipalidad de Quetzaltenango.
El jefe edil también señaló que el contrato vigente fue firmado por el exalcalde Luis Grijalva, y que su administración simplemente lo heredó. “Este es un castigo que hizo el contrato el alcalde anterior, yo vine y lo heredé”, sostuvo.
Durante la reunión, el ministro Ventura defendió al INDE, asegurando que “es una empresa muy noble, muy noble, demasiado noble”, a lo que López replicó con ironía: “Que ya nos puso dos antejuicios, de tan noble que es”, provocando risas entre los presentes.
La tensión entre el gobierno local de Quetzaltenango y el INDE parece intensificarse, mientras la población espera una solución que garantice un suministro eléctrico justo y sostenible.