Solo en este año, más de 4 mil casos de diabetes se registran a nivel departamental de Quetzaltenango.
José Racancoj/La Prensa de Occidente
Cada 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes. Esta es una oportunidad, de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), para generar conciencia sobre el impacto de la diabetes en la salud de las personas y para resaltar las oportunidades para fortalecer la prevención, diagnóstico y tratamiento de la diabetes.
La diabetes es una enfermedad crónica, que se manifiesta por un aumento en los niveles de glucosa o azúcar en la sangre; sin embargo, hay quienes no ponen atención a los síntomas y con el tiempo se producen padecimientos en la vista, riñones, nervios, corazón y en los vasos sanguíneos.
En el departamento de Quetzaltenango, de acuerdo con la Dirección de Redes Integradas de Salud (Área de Salud), en lo que va del 2023 se han reportado y atendido 4 mil 293 casos de diabetes.
La institución agregó que la población más afectada por la diabetes en el departamento de Quetzaltenango son las mujeres mayores de 40 años.
Evitar el sobrepeso y la obesidad
De acuerdo con Eduardo Palacios, del Programa Nacional para Prevención de Enfermedades Crónicas no Transmisibles y Cáncer del Ministerio de Salud, tanto en el país como en el resto del mundo, la diabetes se ha quintuplicado en el número de casos desde 1980 al 2023.
Añadió que en el 2004 en la nación había cerca de medio millón de diabéticos y actualmente hay 2 millones 500 mil, lo cual se debe al incremento del sobrepeso y la obesidad en la comunidad.
En la actualidad el 71 por ciento de los adultos y el 40 por ciento de los niños y los adolescentes tienen dificultades de sobrepeso y obesidad, es por ello, que hay que prevenir la diabetes desde la niñez y tratarla en la edad adulta.
Tipos de diabetes
Hay dos tipos de diabetes: la tipo uno que se da en niños y en adolescentes, la cual se debe a una falta de producción de insulina que es la hormona que regula el metabolismo de la glucosa en el páncreas, y la dos que se da en los adultos, la cual sí genera, pero no es suficiente.
El 90 por ciento de casos es de tipo dos, hay una tercera clase que se da en las embarazadas por la elevación de azúcar en la sangre, entonces, se origina la glucosuria estacional que puede desaparecer después del parto. Hay otros tipos, pero son menos importantes; por ejemplo, cuando le quitan el páncreas a alguien o si algunos pacientes están sometidos a ciertos medicamentos.
El problema con ese padecimiento es que no da síntomas, pues la mitad de los diabéticos no los manifiestan y al no presentarlos pueden tener complicaciones cardiovasculares, infarto del corazón, accidente cerebrovascular, amputación de los miembros inferiores, puede tratarse de los nervios o neuropatías u oftálmicas, ceguera, cataratas, también enfermedades renales crónicas, enfatiza el galeno.
La polifagia (mucha hambre), la polidipsia (sed excesiva), la pérdida de peso y la poliuria (excreción muy abundante de orina), son las señales principales de esta enfermedad que podrían aparecer.
Los factores de riesgo que acrecientan de cuatro a seis veces las probabilidades de sufrir ese mal son: el sobrepeso y la obesidad, por lo cual para prevenirla hay que tener una dieta saludable con las calorías necesarias, no excederse con comidas con grasas saturadas o trans que no tengan demasiados azúcares.
Así como proteínas balanceadas, es decir, que contengan por ejemplo, carnes magras sin gordos, pues esas son grasas saturadas como la leche entera de vaca, evitar los caldos y los consomés porque también tienen grasas trans.
“Se debe comer frutas y verduras todos los días y hacer ejercicio por lo menos 30 minutos diarios durante cinco días a la semana para los adultos y una hora al día para los niños para mantener un cuerpo saludable y libre de ese sufrimiento”, concluyó el profesional.