
Molina enfatizó que intereses de un grupo específico busca manipular el proceso electoral para que rinda los resultados que a ellos les convenga, e insta al pueblo a la resistencia para evitar la crisis institucional.
Rita María Aguilar / laprensadeoccidente.com.gt
El arzobispo de los Altos, Monseñor Mario Alberto Molina, manifestó dentro de la Homilía del Tedeum de este 14 de septiembre, que dentro de la coyuntura actual del país, “las miradas están puestas en el proceso electoral y en las acciones del Ministerio Público -MP-”.
“Las autoridades más conspicuas (del MP) dcen que cumplen con su deber de investigar las denuncias que ciudadanos han presentado en contra de algunos partidos, ojalá que todas las denuncias recibieran atención tan cumpida”, expresó el prelado, haciendo referencia a la celeridad y empeño que el ente investigador ha puesto sobre dicho caso.
Así también hizo ver que la opinión generalizada es que detrás “de la formalidad de fachada se esconde la instrumentalización del Estado para lograr intereses particulares” y que los delitos denunciados afectan a todos los partidos políticos, ya que “lamentablemente la corrupción y la negligencia son males generalizados” con una justicia que está al servicio del poder y de “intereses sectoriales así sea a precio de ignorar la voluntad popular manifestada en las urnas”.
Otro de los puntos que Monseñor Molina hizo ver, es que la integridad del proceso electorales la institución básica de la democracia de las sociedades y remarcó que el sistema de votación está diseñado para no corromperse, pero que lo “torpedean” para manipularlo de tal forma que rinda resultados de un grupo específico, instrumentalizando la justicia “para que sean los jueces los que determinen el ganador del proceso electoral”, pero será la resistencia del pueblo la que detenga el colapso institucional, así como pasó hace ocho años.
Asimismo remarcó que los políticos son pecadores y deberán rendir cuentas en un momento dado a la justicia de la tierra y también lo harán ante Dios.